Título: Corazón de tinta
Autor: Cornelia Funke.
Género: Fantasía, aventura.
Año de
publicación: 2003.
Editorial: Siruela.
Saga/Autoconclusivo:
Saga (1/3)
Nº de páginas: 596.
P.V.P: 18,95€
Puntuación media: ★★★★★★★★✩✩
(8,4/10)
-Trama:
★★★★★★★✩✩✩
-Personajes:
★★★★★★★★✩✩
-Longitud:
★★★★★★★★★✩
-Estructura
y construcción del mundo: ★★★★★★★★★✩
-Opinión
personal: ★★★★★★★★★✩
Meggie, una niña de doce años, y Mortimer, su padre, un “médico”
de libros, viven rodeados de libros, tropezando y conviviendo con ellos, sin
embargo, a Meggie nunca la han leído ninguno en voz alta. Así empieza esta
historia, que, como los libros, bajo la cubierta ocultan mas de lo que se ve a
simple vista.
Un libro sobre un libro, personajes surgidos de la tinta y
el papel, con solo la fuerza de la voz de un lector. ¿Quién no ha soñado poder
sacar a algún personaje de su libro favorito? ¿O poder vivir aventuras dentro
de uno de ellos?
Aquí es donde viene lo realmente
fantástico de este libro, no se queda ahí, si no que va un paso más allá. A
pesar de que parece una idea completamente perfecta y maravillosa, todo tiene
un parte oscura y peligrosa. Y si al tratar de sacar a nuestro personaje
favorito, no surgiese de entre la tinta y las guardas, lo que estábamos
esperando. En vez de el héroe, el mago o el personaje encantador, brotase de
entre las paginas el villano sediento de sangre o el monstruo aterrador que se
esconde en nuestras pesadillas.
Que pasaría si en vez de
Campanilla, el hada madrina o Gandalf surgieran los peores villanos, la Bestia,
los Chandrian, Jadis o el dragón Smaug.
Por suerte esta “habilidad” no
viene con manual de instrucciones, así que yo me lo pensaría dos veces antes de
leer en voz alta un libro, no sea que saquemos algo que debería permanecer
encerrado bajo las tapas.
“Corazón de tinta” va sobre una
niña de doce años llamada Meggie, y su padre, un “medico” de libros que se
pasan la vida viajando por Europa reparando viejos libros, liberándolos de sus
ropas apolilladas y de las molestas criaturas que roen sus páginas.
La historia arranca con la
aparición bajo la lluvia de un misterioso personaje de pelo largo, que trae
consigo la pegajosa sombra de la maldad, de un libro y unos personajes que no
han conseguido dejar atrás.
Como libro es una joya de la
literatura juvenil y “middle-grade”, aunque os aseguro que sea cual sea la edad
que tenga el lector, podréis disfrutar de una obra fantástica y maravillosa.
Una de las cosas que mas me
gustaron fue la forma que toma el enfrentamiento eterno entre el bien y el mal.
No siempre el que parece un villano no sea un héroe abocado a la oscuridad por
las circunstancias, aunque aun permanece la figura del ser despreciables que
disfruta del dolor causado en otros seres vivos, sin el menor remordimiento,
incluso el bando malo tiene motivos (no siempre validos) para ser como son,
equilibrando la obra y dándole un aire de realidad realmente delicioso y
apetecible.
Teniendo en cuenta todos los
temas de los que trata, Cornelia Funke escribe con una sencillez y ligereza
envidiables. A pesar de que es un libro relativamente largo (unas 600) no se
hace en ningún momento lento, pesado o aburrido, enhebrando la historia de un
modo fluido y natural.
Es uno de estos libros que no
solo te deja huella cuando lo lees por primera vez, sino que no se pierde ni
decolora tras releerlo unas cuantas veces (creo que unas 4 con esta) y es esa
forma de tomar historias clásicas que todos conocemos y unirlas junto con los
nuevos personajes de la propia autora.
Consigue hacer propios a
personajes como Campanilla o el soldadito de plomo, entre otros, sin dejar de
lado a sus propios autores, pero dándole un ritmo nuevo. También refleja la
idea tan marcada en muchas ocasiones, se separa la imagen del libro como del
autor, como si no fueran personas vivas , normales y corrientes.
Otra de la partes mas especiales
del libro, son los pequeños fragmentos de otros libros, relacionados con el propio
capitulo de la novela al que precede.
El único punto que me choca de la
novela es el final, se que esta hecho de esta manera para no cerrarlo del todo
y poder continuar la saga en los dos tomos siguientes. También deja de lado el cliché
para que al final consigan el control total y absoluto del poder del
protagonista.
Tras haberlos leído varias veces,
he llegado a la conclusión de que el final gana mucho más al ser mas realista,
no alcanzando un nivel de perfección empalagosa y pastosa, sino que, aunque
deben tirar con lo que los ha tocado (hablando en plata).
Tengo claro, que el final
pasteloso que esperaba las primeras veces fue debido a la película que hicieron
del libro, francamente inferior al libro, que era un “deus ex machina” en toda
regla.
Cornelia Funke ha sabido crear
una obra mágica y fantástica, la mayor expresión que conozco de amor por los
libros, del enfrentamiento entre ficción y realidad, esa delgada línea que nos
separa de las historias y cuentos. Una historia que ensalza a la figura del
lector de historias, libros, cuentos y fabulas.
"Si te llevas un libro a un viaje —le había dicho Mo cuando introdujo el primero en la caja— sucede algo muy extraño: el libro empezará a atesorar tus recuerdos. Más tarde, te bastará con abrirlo para trasladarte al lugar donde lo leíste por vez primera. Y con las primeras palabras recordarás todo: las imágenes, los olores, el helado que te comiste mientras leías... Créeme, los libros son como esas tiras de papel matamoscas. A nada se pegan tan bien los recuerdos como a las páginas impresas."
"Si te llevas un libro a un viaje —le había dicho Mo cuando introdujo el primero en la caja— sucede algo muy extraño: el libro empezará a atesorar tus recuerdos. Más tarde, te bastará con abrirlo para trasladarte al lugar donde lo leíste por vez primera. Y con las primeras palabras recordarás todo: las imágenes, los olores, el helado que te comiste mientras leías... Créeme, los libros son como esas tiras de papel matamoscas. A nada se pegan tan bien los recuerdos como a las páginas impresas."